Habitantes de Pantelhó rechazan al alcalde electo, quieren desaparición de poderes
Las tensiones acumuladas en Pantelhó no han estallado el primero de octubre, día del cambio de administración municipal, disputada entre el alcalde electo y un concejo popular nombrado por usos y costumbres. Algunas casas siguen cerradas, otras quemadas, decenas de elementos de la Guardia Nacional y del ejército todavía resguardan la entrada de la cabecera municipal, ayer el pueblo que se levantó en contra del crimen organizado lucía tranquilo, a pesar de las alertas.
La insurrección en este poblado de Los Altos de Chiapas empezó el 7 de julio, cuando salió a luz pública El Machete, un grupo de autodefensa que acusó a la alcaldesa Delia Janeth Velasco Flores y a su esposo Raquel Trujillo Morales – presidente municipal electo el 6 de junio por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) – de formar parte del crimen organizado y ser responsables del asesinato de unos 200 pobladores. Por esto fueron expulsados, junto con otras personas acusadas de pertenecer al grupo criminal de Los Herrera, y fueron retenidos 27 pobladores que están desaparecidos.
“Desde hace dos meses no tenemos noticias de nuestros familiares. Hablamos con las autoridades en Ciudad de México, Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de Las Casas, pero nadie nos da respuesta”, dijo durante una protesta frente al Palacio de Justicia de San Cristóbal de Las Casas Giovanni Aguilar Moreno, familiar de una de las personas retenidas por El Machete, y asegura que no tiene relación alguna con el presidente municipal electo Raquel Trujillo Morales.
El 9 de agosto los pobladores de Pantelhó nombraron a un concejo municipal que fue luego reconocido legalmente por el Congreso de Chiapas, cuyo periodo de gobierno terminó el 30 de septiembre. Qué iba a pasar después de esta fecha ha sido la gran pregunta, siendo que el concejo municipal quiere seguir gobernando y Raquel Trujillo no está dispuesto a dejar el cargo que, de acuerdo con los pobladores, obtuvo a través de amenazas e irregularidades electorales.
La situación se tensó especialmente cuando el alcalde electo anunció en redes sociales que había regresado a Pantelhó para “liberarlo”, y hasta solicitó a la Secretaría de Gobernación medidas cautelares para entrar al poblado. En Pantelhó creció el temor que su regreso desatara una nueva ola de violencia.
“Habrá más desplazamientos forzados, narcobloqueos y enfrentamientos entre grupos armados en que la gente inocente queda atrapada con balas perdidas y/o dirigidas con olor a muerte”, advirtió la parroquia de San Pedro Apóstol del municipio de Chenalhó, que colinda con Pantelhó. El miedo era tan grande y el recuerdo de la violencia de julio tan vivo, que unas 90 personas pertenecientes a la Sociedad Civil Las Abejas dejaron Pantelhó y se refugiaron en Acteal para resguardarse de los posibles enfrentamientos.
También las autodefensas El Machete se prepararon frente a la posible llegada del alcalde electo. En un video en lengua tsotsil, donde aparecen unas trecientas personas con el rostro tapado y armas largas, dicen que tras un periodo de repliegue decidieron activarse nuevamente el 28 de septiembre. “Raquel Trujillo a la fuerza quiere entrar el 1 de octubre junto con los sicarios. Pero como autodefensas estamos dispuestos a luchar. No atacaremos a la Guardia Nacional ni a la gente de gobierno, nosotros solo atacamos a los sicarios si acaso llegan a atacar al pueblo de Pantelhó”, afirmaron.
Pero Raquel Trujillo Morales logró evitar el problema. Tras semanas de peregrinaciones entre Tuxtla Gutiérrez y Ciudad de México – donde denunció que desde la aparición de las autodefensas Pantelhó vive en el caos y aseguró tener el respaldo de la población – en lugar que atreverse a regresar a Pantelhó, celebró su toma de protesta en un hotel frente a un notario. “Aquí tienen un amigo y vamos a trabajar de la mano con todas y todos, por un mejor Pantelhó, para la paz, la justicia y el desarrollo”, dijo Trujillo Morales en un video que difundió ayer, donde asegura que se instaló también su sesión de cabildo.
De acuerdo con el abogado David Daniel Romero Robles, quien acompañó procesos de autonomía indígena como el de Cherán, políticamente la decisión de Raquel Trujillo Morales no es la más correcta, pero constitucionalmente es presidente municipal y va a poder disponer de los recursos, aunque no esté ejerciendo en la cabecera municipal.
“Las tomas de protesta son simbólicas y políticas, para ellas no está establecido un procedimiento específico. La constancia que se recibe del Instituto Electoral de cada Estado brinda validez al ejercicio en función de los presidentes municipales”, afirma David Daniel Romero Robles. “La gente de Pantelhó podría solicitar al Congreso del Estado la desaparición de poderes, que es un argumento constitucional para que se nombre, o ratifique, a un nuevo concejo desde la comunidad”.
Padre Marcelo Pérez, quien acompañó a los pobladores de Pantelhó en unas reuniones que mantuvieron con las autoridades, afirma en entrevista telefónica que al enterarse de la toma de protesta de Raquel Trujillo se comunicó inmediatamente con el gobierno estatal. “Me dijeron que están buscando la manera legal y constitucional para la desaparición de poderes del alcalde electo y para que el Concejo Municipal pueda seguir trabajando. Tengo confianza en que va a ser realidad”, afirma el sacerdote católico.